Terminó el circo electoral. Tanto el correísmo como el gobierno, se
atribuyen la victoria en la consulta popular.
Si bien es cierto, el gobierno del terrateniente logró el SI en 9
preguntas, en las dos restantes, las más “sensibles”, fueron rechazadas por los
votantes.
Hay quienes quieren hacernos ver la supuesta “obviedad” de las 9 preguntas,
la mayoría de ellas, comprometidas con la seguridad.
Desde luego que las masas quieren que la violencia pare, que no haya
masacres, atentados, extorsiones, secuestros, a la final, son los sectores
populares, la pequeña y mediana burguesía, quienes ponen las víctimas; los
grandes empresarios y grandes terratenientes, no, están salvaguardados por el
paramilitarismo, fuerzas que crecen en el país, y por los aparatos represivos
del viejo estado.
Puede resultar obvio que hayan votado por el SI, pero, atrás de los
argumentos “anti violencia”, se aprobó la extradición, una herramienta jurídica/político,
que avala las viejas aspiraciones del imperialismo por contar con este
instrumento que presiona, neutraliza u opera no solo sobre delincuentes, sino
también contra luchadores populares. Recordemos la tristemente célebre prisión
de Guantánamo, donde estaban encarcelados, en condiciones infrahumanas,
luchadores populares del mundo.
Pero, además, la aprobación de estas 9 preguntas, conlleva la legalización
y regularización del proceso de militarización de la sociedad, la
coorporativización de las masas y la consolidación del proyecto fascista, cuyo
génesis, hay que ubicarlo en el gobierno del correato.
La aprobación de trabajo por horas buscaba normar o regular aquello que en
la práctica ya está instituido en el campo y en la ciudad. Los campesinos
pobres de todas las regiones del país, trabajan por horas, por diario o semana.
¿Qué diferencia hace con la aprobación o no de la propuesta de trabajo por
horas? Los trabajadores de la construcción, trabajan a “destajo”, horas, diario
o semana, sin ninguna regulación legal, sin beneficios.
La gran burguesía ecuatoriana es troglodita, añeja, corrupta, igualmente,
atropella los derechos de los trabajadores, y no dudemos, lo seguirán haciendo,
y no, porque haya ganado la oposición a esa pregunta, quiere decir que las
relaciones laborales y con ellas, las relaciones de producción en el país, sean
un remanso donde todos estamos alegres, contentos. Hay que resaltar una vez
más, en el campo, la relación entre terratenientes y campesinos pobres,
jornaleros y trabajadores es feudal y semifeudal, y ahí, las cosas, no cambian
sustancialmente. Tampoco sucede lo mismo en las ciudades, donde las relaciones
laborales están atravesadas por el servilismo, el clientelismo, es decir,
semifeudalidad.
Pero, hay un aspecto notorio e importante. Es lo que más resaltamos, casi
un 30% de ausentismo.
Las razones para justificar este “comportamiento” de las masas pueden ser varias,
pero hay dos en fundamental; las permanentes campañas de actores políticos como
el FDLP-EC; Vientos del Pueblo y otros, que bregan en contra de las consultas y
elecciones, porque está visto, a lo largo del tiempo, no soluciona nada en
función del interés de las masas, más sí en el perfeccionamiento de la vieja
democracia burgués-terrateniente y el salvataje del capitalismo burocrático.
Y hay otro aspecto que abona a este comportamiento de las masas, ¡están
podridas!, ¡hartas!, ¡ya no creen en este tipo de circo!; y eso es bueno,
porque va allanado el camino para definir, de mejor manera, el derrotero de la
revolución y solucionar, definitivamente, las aspiraciones y reivindicaciones
de la clase y del pueblo.
Nuevo estado de emergencia, más poder para policías y militares, más coerción
para las organizaciones populares, sindicales y campesinas; más penetración,
fundamentalmente, del imperialismo yanqui. La consulta no trajo sino una auscultación
que le ha permitido, a la gran burguesía, medir las fuerzas entre las dos
corrientes burguesas que pugnan y coluden, la burguesía compradora, vs, la
burguesía burocrática. Más allá de eso, no hay nada nuevo, bajo el sol, para
nuestro pueblo.
Se vienen momentos más difíciles para las masas. El gobierno seguirá en
picada: violencia, desempleo, alto costo de la vida, crisis energéticas, incremento
de combustibles, alza en precio de canasta básica, y ante eso, se están “vacunando”
con las FFAA en las calles, quieren conjurar la rebelión de las masas. A los comunistas,
a los antielectoreros y antiimperialistas, a las fuerzas progresistas
comprometidas con los intereses del pueblo, nos corresponde dar respuesta al
gobierno, al estado y al imperialismo, con movilizaciones, con mejorar y elevar
nuestras formas de lucha a niveles superiores. No son tiempos para rumiar los
cálculos electorales, no debemos dejarnos engañar con el sainete que nos
quieren meter con la captura de capos de la droga barrial mientras los grandes,
los “intocables” están en el circulo gubernamental, represivo y gran
empresarial; o, los casos empujados por la fiscalía donde la dicotomía,
correístas no correístas, ha logrado cooptar la atención de mucha gente. A
nosotros, el elemento consciente de la clase y del pueblo nos corresponde hacer
lo único que tenemos qué hacer: ¡organizarnos, combatir y resistir!
¡A PREPARAR LA GRAN MOVILIZACIÓN DE TRABAJADORES
EN CONTRA DEL GOBIERNO FASCISTA DEL TERRATENIENTE!
¡SOLO CON LUCHA SE CONQUISTAN DERECHOS Y LIBERTADES!
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