Hoy más que
nunca cobra fuerza la necesidad de dejar de lado la celebración del 8 de marzo
como el día internacional de la mujer
ya que urge entender que no todas somos iguales, que nuestra sola condición de
mujer dice mucho y nada a la vez, pero nuestra condición de mujeres
trabajadoras, oprimidas y explotadas en verdad lo dicen todo. En esa medida
debemos hacer de éste día una proclama de lucha de la mujer trabajadora, explotada pero sobre todo ¡REBELDE!
No hay nada que festejar, hay mucho por hacer. Por
ejemplo: organizarnos, combatir, entender que la mujer lleva sobre sus hombros la mitad del cielo y deben
conquistarla (Mao Tse-tung)
En el mundo se viven una serie de conflictos producto
de la crisis y voracidad del imperialismo y de la gran burguesía. En el país no
es diferente. El régimen fascista de Correa a emprendido con una reforma
estatal del capitalismo burocrático y para ello han pretendido hacernos creer
que vivimos una revolución. ¡¡Falacias!!, las revoluciones, compañeras, no se
las hace en las urnas, no la hacen los ciudadanos, las hacen hombres y mujeres
identificadas por su carácter de clase. Y precisamente es lo importante a rescatar,
que la mujer tiene valía no únicamente por su condición de mujer, de madre, de
trabajadora sino por su condición de clase y su disposición para la lucha. La
mujer digna, rebelde es aquella que asume una posición de frente al mundo y sus
realidades, sus contradicciones. Mujer digna es aquella que se pone del lado de
los obreros, de las campesinas pobres, de las vendedoras, artesanas, en fin, de
las trabajadoras explotadas y que buscan por todos los medios emanciparse.
Pero para poder darle sentido a nuestra condición de
mujer necesitamos organizarnos. Nunca más en los partidos en los que somos
utilizadas como “ganado” electoral. Nunca más en los partidos que se dicen
revolucionarios donde trafican con nuestra crítica situación de opresión,
discriminación, explotación y marginación para terminar coludiendo con quienes
precisamente nos discriminan y explotan. Nunca más en las organizaciones del
feminismo burgués donde solo pretenden incluirnos en el Viejo Estado que es
donde se reproducen las taras semifeudales de la discriminación, el machismo y
la explotación. Necesitamos crear nuestra propia organización, nuestro propio
movimiento, donde no escondemos para nada nuestros propósitos, donde tenemos
claro que si no es en el camino democrático que es el camino de la revolución
no podremos conquistar ninguno de nuestros derechos. Que si no nos pertrechamos
de la correcta ideología nada podremos conquistar.
Una organización que nos agrupe y nos conduzca por el
camino correcto a luchar incansablemente por la conquista de nuestras
reivindicaciones de género, como madres, como compañeras y sobre todo como ser
componentes de una clase que a pesar de estar hoy oprimida y explotada está destinada
a conquistar el Poder.
Hoy, 8 de marzo, un día más de lucha de la mujer
trabajadora, explotada, discriminada y oprimida te invitamos a fortalecer las
filas del MOVIMIENTO FEMENINO POPULAR consientes de que solo en la
organización y en la lucha podremos conquistar derechos y libertades.
VAMOS A DESATAR
LA FURIA DE LA MUJER OPRIMIDA POR LA
CONQUISTA DE NUESTROS HISTÓRICOS Y
LEGÍTIMOS DERECHOS.
POR LA NUEVA
DEMOCRACIA: ¡¡MOVIMIENTO FEMENINO POPULAR!!
DESENCADENAR LA
PODEROSA FUERZA DE LA MUJER PARA
LEVANTAR LA MITAD DEL CIELO
Comentarios
Publicar un comentario