Se cumplió con la movilización
nacional convocada por las organizaciones sindicales y populares en el país
para el 9 de octubre.
Si bien es cierto en el masivo desplazamiento de trabajadores hubo
focos de combatividad expuestos por el elemento consciente de la clase y del
pueblo, la dirigencia oportunista arrastró a la mayoría de los manifestantes a
una marcha de corderos; radicales en el discurso, domesticados en la acción.
Hoy amanecimos con dos luchadores más asesinados por los aparatos
represivos del viejo estado. Desde el inicio de la rebelión popular ya van siete
muertos confirmados en el seno del pueblo; más de 200 heridos de gravedad,
cerca de un millar de detenidos; hospitales y centros de concentración
humanitaria bombardeadas con gas, disparos de armas con munición letal y no
letal.
Carreteras bloqueadas, los campos de petróleo ocupados por masas de
campesinos e indígenas pobres y la producción de petróleo suspendida; un mar de
masas combatiendo en las calles y el régimen con su ministra del interior y el
ministro de defensa insisten, con complicidad de la prensa, que no pasa nada en
el país.
En el transcurso del día se han registrado, además de las
permanentes luchas por la toma de Carondelet, algunas acciones que queremos resaltar:
1.
La retención de varios policías por parte de los campesinos y
llevados a la Casa de la Cultura, lugar donde estaban concentradas las
delegaciones de las distintas organizaciones en pie de lucha. Los policías
fueron obligados a cargar el ataúd de uno de los compañeros indígenas asesinados
por la represión.
El carácter simbólico de esta
acción es inconmensurable. La
responsabilidad que tienen policías, militares bajo el mando de la ministra del
Interior María Paula Romo y del ministro de defensa, Oswaldo Jarrín no puede
pasar desapercibida en la historia. Hoy, más que nunca se la ha logrado
imprimir derrotas humillantes a miembros del ejército y de la policía.
2.
La decisión del movimiento indígena/campesino de condicionar el
diálogo con el gobierno. Retirar de sus funciones a la ministra del interior y
al fascista ministro de defensa, sumado a la derogatoria de las medidas
económicas, establece las pautas para las tratativas.
3.
La decidida acción de un valeroso hijo del pueblo que atentó contra
el periodista Freddy Paredes, del canal
Teleamazonas, uno de los canales de televisión más conservador, retardatario y antipopular
del país. Esta acción establece las condiciones que requiere la movilización. Es
importante no dejarse ganar de los oportunistas que quieren mostrarse
pacíficamente y que pretenden negarle al pueblo el legítimo derecho a
contraponer a la violencia reaccionaria, la violencia revolucionaria...
4.
El incremento de acciones violentas en contra de los represivos. La utilización
de bombas incendiarias que causaron serias heridas a miembros de la policía
nacional en el centro de la ciudad.
5.
La incorporación de un mayor número de masas campesinas e indígenas
que se movilizan desde el oriente y sur del país.
Al parecer la estrategia del régimen de endosar las luchas del
pueblo al correismo, o al vandalismo parece cambiar paulatinamente, hoy quieren
mostrar o simplificar la lucha al movimiento indígena soslayando,
deliberadamente, la participación del movimiento sindical, popular, estudiantil
y campesino en la justa lucha.
Hay que decirlo, aquí y ahora, NO HABRÁ PERDÓN NI OLVIDO PARA LOS
REPRESORES DEL PUEBLO; NO HABRÁ PERDÓN NI OLVIDO PARA AQUELLOS QUE TRAFIQUEN Y
NEGOCIEN CON LA SANGRE DEL PUEBLO.
Y en esto queremos ser incisivos, dirigente popular, sindical,
campesino que se atreva a negociar la sangre que derrama el pueblo tendrá que
responder de cara a la historia.
A lo largo de la historia hemos estado acostumbrados que la
dirigencia oportunista y revisionista siempre, siempre termine negociando con
la patronal, con la represión, con los gobiernos de turno, en fin, con el viejo
Estado, la sangre y las luchas del pueblo. Es oportuno insistir en esto una y
mil veces: DIRIGENTE SINDICAL, POPULAR, CAMPESINO E INDÍGENA QUE TRAICIONE LA
SANGRE DEL PUEBLO, DEBERÁ RESPONDER ANTE LA CLASE.
Rechazamos también el respaldo internacional que han otorgado la
rata Sebastián Piñera de Chile y el perro Martín Vizcarra del Perú al gobierno
títere y fascista de Moreno. Desde la otra colina, agradecemos la solidaridad
que ha presentado el proletariado internacional a la justa lucha del pueblo
ecuatoriano.
Hay que profundizar la lucha, hay que militarizar la acción; urge
dar respuestas más contundentes al viejo estado, a su aparato represivo y al
gobierno, hay que reivindicar la vida de nuestros mártires atizando la rebelión
popular. Hay que aplicar y desarrollar violencia revolucionaria, es la consigna
a levantar.
¡LA REBELIÓN SE
JUSTIFICA, AQUÍ, Y AHORA!
¡PALABRA POR
PALABRA, GOLPE POR GOLPE, SANGRE POR SANGRE!
¡A RADICALIZAR LA
REBELIÓN CON VIOLENCIA REVOLUCIONARIA!
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