Hace
un par de semanas, en medio de la propagación del coronavirus en el mundo, EEUU
bombardeó a las milicias pro iraníes en Irak. Se reportaron muchas bajas entre
la población civil; de hecho, un ciudadano británico estuvo entre las víctimas.
Pero
la ofensiva del garrote del capitalismo en el mundo no queda ahí. Ahora ha
declarado objetivo a Nicolás Maduro y ofrece 15 millones de recompensa para
quién facilite su captura.
El
imperialismo lo quiere todo, y sin lugar a dudas, hará todo lo posible, lo
inimaginable por conquistar sus objetivos. Hacen bien; los pueblos oprimidos
del mundo haremos todo, hasta lo inimaginable para detenerlo, destruirlo y colocar
sus cenizas en el basurero de la historia. Definitivamente, lo haremos mejor.
Pero
el imperialismo yanqui no opera sólo; su aliado del otro lado del mundo, el sionismo
israelí toma la posta.
Hace
dos días la aviación y tanques israelíes bombardearon una zona de la franja de
Gaza; uno de los lugares con mayor densidad poblacional del mundo.
Mientras
los palestinos guardaban cuarentena, las bombas sionistas causaron muchas
muertes y daños a la población “civil”.
Condenamos
este ataque alevoso y cobarde que no tendrá perdón ni olvido por parte de los
pueblos del mundo.
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