¡Proletarios de todos los países, uníos!
El mundo está en agitación. En todos los continentes los maestros imperialistas de la guerra, la destrucción, la opresión y la explotación, desatan su asalto sanguinario contra los pueblos del mundo. Las huellas del caos, la miseria y el hambre están por todas partes a la vista. El genocidio en curso en Yemen, los constantes intentos de borrar Palestina, la guerra reaccionaria contra los pueblos de Turquía, Perú, Filipinas y otros, la guerra reaccionaria no declarada, pero real, contra los pueblos de países como Brasil y México, las guerras que se desatan en cada vez más partes del mundo. Estos vampiros, los imperialistas y sus compinches, también fortalecer su control sobre el cuello de las masas en sus propios países mientras afilan sus cuchillos de carnicero para volverse unos contra otros para decidir por la fuerza si los yanki-imperialistas deben continuar en la posición de perro de cabeza o alguien del otros ladrones deberían derrocarlos. Pero la opresión genera resistencia y los pueblos buscan y encuentran formas de contraatacar. Los pueblos heroicos del mundo han demostrado una y otra vez al mundo, al derrotar en guerras prolongadas hasta a la máquina de guerra más mortífera que se haya visto en la historia, los yanquis y sus aliados, que un pueblo oprimido, mientras persista en la lucha armada y depende de su propia fuerza, puede alcanzar la victoria, incluso si la dirección de la resistencia nacional lleva banderas reaccionarias. Aún así, esta victoria no puede realmente liberar al pueblo del yugo del imperialismo, pero muy pronto se pierde lo que se ha ganado, sólo porque la dirección lleva banderas reaccionarias. Estos procesos ocurren una y otra vez, los pueblos luchan y ganan pero son traicionados por los falsos líderes. En este sentido, ante la embestida del imperialismo y la lucha y resistencia de los pueblos, la cuestión de brindar una dirección correcta, que realmente sirva al pueblo, se vuelve crucial y es en este contexto que todos los oprimidos y explotados deben volver la mirada hacia la India. .
La Guerra Popular en la India muestra el camino a seguir
El Partido Comunista de la India (Maoísta) ha construido un poderoso ejército popular, el Ejército Guerrillero Popular de Liberación (PGLA), que defiende los intereses de los trabajadores, campesinos y todos los demás sectores del pueblo que se oponen al reaccionario estado indio. que sirve a los intereses de los capitalistas burocráticos, los terratenientes y el imperialismo extranjero. El PGLA eleva a las masas a la lucha y las organiza para luchar con el arma en la mano para destruir el estado reaccionario y construir uno nuevo que sirva a los pueblos de la India y no a los chupasangres. Hoy, en distintos puntos del interior de la inmensa geografía del país, se han constituido comités populares revolucionarios. En estos comités populares se ha repartido la tierra a su labrador, se han abolido todas las leyes reaccionarias, La opresión de las mujeres se combate ferozmente y los gobernantes de las masas son las masas mismas. Una nueva sociedad está naciendo en medio de la vieja. Estos comités populares revolucionarios ahora tienen millones de personas viviendo en ellos y, tomados en conjunto en un sistema, se han convertido en bases de apoyo florecientes de la revolución india. Siguiendo el camino de cercar las ciudades desde el campo, la Guerra Popular avanza, entre idas y venidas, hacia la conquista del poder político en el segundo país más poblado del mundo. Esta ardua y prolongada lucha, dirigida por un verdadero Partido Comunista, es un poderoso faro de esperanza e inspiración para todos los que quieren ver el fin de la pesadilla imperialista y luchan por la construcción de una sociedad libre de opresión y explotación. Una nueva sociedad está naciendo en medio de la vieja. Estos comités populares revolucionarios ahora tienen millones de personas viviendo en ellos y, tomados en conjunto en un sistema, se han convertido en bases de apoyo florecientes de la revolución india. Siguiendo el camino de cercar las ciudades desde el campo, la Guerra Popular avanza, entre idas y venidas, hacia la conquista del poder político en el segundo país más poblado del mundo. Esta ardua y prolongada lucha, dirigida por un verdadero Partido Comunista, es un poderoso faro de esperanza e inspiración para todos los que quieren ver el fin de la pesadilla imperialista y luchan por la construcción de una sociedad libre de opresión y explotación. Una nueva sociedad está naciendo en medio de la vieja. Estos comités populares revolucionarios ahora tienen millones de personas viviendo en ellos y, tomados en conjunto en un sistema, se han convertido en bases de apoyo florecientes de la revolución india. Siguiendo el camino de cercar las ciudades desde el campo, la Guerra Popular avanza, entre idas y venidas, hacia la conquista del poder político en el segundo país más poblado del mundo. Esta ardua y prolongada lucha, dirigida por un verdadero Partido Comunista, es un poderoso faro de esperanza e inspiración para todos los que quieren ver el fin de la pesadilla imperialista y luchan por la construcción de una sociedad libre de opresión y explotación. tomados en conjunto en un sistema, se han convertido en bases de apoyo florecientes de la revolución india. Siguiendo el camino de cercar las ciudades desde el campo, la Guerra Popular avanza, entre idas y venidas, hacia la conquista del poder político en el segundo país más poblado del mundo. Esta ardua y prolongada lucha, dirigida por un verdadero Partido Comunista, es un poderoso faro de esperanza e inspiración para todos los que quieren ver el fin de la pesadilla imperialista y luchan por la construcción de una sociedad libre de opresión y explotación. tomados en conjunto en un sistema, se han convertido en bases de apoyo florecientes de la revolución india. Siguiendo el camino de cercar las ciudades desde el campo, la Guerra Popular avanza, entre idas y venidas, hacia la conquista del poder político en el segundo país más poblado del mundo. Esta ardua y prolongada lucha, dirigida por un verdadero Partido Comunista, es un poderoso faro de esperanza e inspiración para todos los que quieren ver el fin de la pesadilla imperialista y luchan por la construcción de una sociedad libre de opresión y explotación.
¡Abajo la guerra contra el pueblo!
El viejo Estado indio, como máquina burocrático-militar al servicio de los enemigos del pueblo, ha hecho de todo para ahogar en sangre la lucha de las masas. Independientemente de cuál sea la facción de las clases dominantes que haya ocupado las curules de gobierno, no ha habido ni puede haber otro camino para ellas más que desplegar sus operaciones de guerra contrarrevolucionarias contra el avance del movimiento popular en en general y su punta de lanza, el movimiento revolucionario encabezado por el PCI (maoísta) en particular. El notorio régimen reaccionario y genocida encabezado por Modi, tristemente célebre en el mundo por cosas como sus viciosos crímenes contra los musulmanes en la India y su rampante misoginia, por supuesto que no se queda atrás en este sucio comercio. “Operación Cacería Verde”, “SAMADHAN” y “Prahar” son nombres de campañas reaccionarias que realizan según el concepto imperialista de “Conflicto de Baja Intensidad” que no solo incluye medidas militares (genocidio y represión contundente), sino también componentes “sociales” (como “ socorro y asistencia” por parte de los defensores armados del viejo orden, que utiliza como arma el hambre y la miseria de las masas) y la guerra psicológica (propagación de patrañas, mentiras y miedo). El régimen de Modi usa todas estas “tácticas” mientras promueve el comunalismo brahmánico hindtwa más chauvinista. En su esfuerzo morboso, incluso utilizan el Ejército y la Fuerza Aérea de la India contra el pueblo. Un ejemplo reciente y pérfido son los bombardeos aéreos masivos contra las masas en Chhattisgarh el 15 de abril de este año, donde se utilizaron más de 50 drones.
¡Adelante en la construcción del frente antiimperialista!
Se debe apoyar la lucha heroica de las fuerzas revolucionarias dirigidas por el PCI (Maoísta) y difundir la información sobre la Guerra Popular a todas las fuerzas progresistas ya la opinión mundial en general. Esta tarea es parte del núcleo mismo de cualquier movimiento antiimperialista posterior. La bandera de la revolución india debe mantenerse en alto con firmeza y servir como grito de batalla contra el imperialismo y todos sus compinches. Debe denunciarse el carácter genocida del viejo Estado y del régimen que lo encabeza. La represión y persecución contra el movimiento popular, las minorías nacionales, los “dalits” y todos los demás sectores de las masas oprimidas debe combatirse con solidaridad práctica. Hay que oponerse a la supresión de los derechos democráticos básicos, como la libertad de expresión. Se debe fortalecer la solidaridad con los miles y miles de presos políticos y los casos de intelectuales progresistas tan destacados como el poeta Varavara Rao y el profesor GN Saibaba no deben quedar desatendidos por quien quiera ser defensor de los derechos de los pueblos. El verdadero internacionalismo significa apoyo moral, político y material, práctico, a la lucha revolucionaria. Cualquier otro enfoque, que pretenda utilizar esta lucha para intereses mezquinos, solo equivale a tráfico. En este sentido, como parte de dar unos primeros pasos hacia la construcción del frente antiimperialista, hacemos un llamado a todos los amigos de la revolución india a realizar un Día Internacional de Acción conjunto en apoyo a la Guerra Popular en India el próximo el 9 N. Saibaba no debe quedar desatendido por quien quiera ser defensor de los derechos de las personas. El verdadero internacionalismo significa apoyo moral, político y material, práctico, a la lucha revolucionaria. Cualquier otro enfoque, que pretenda utilizar esta lucha para intereses mezquinos, solo equivale a tráfico. En este sentido, como parte de dar unos primeros pasos hacia la construcción del frente antiimperialista, hacemos un llamado a todos los amigos de la revolución india a realizar un Día Internacional de Acción conjunto en apoyo a la Guerra Popular en India el próximo el 9 N. Saibaba no debe quedar desatendido por quien quiera ser defensor de los derechos de las personas. El verdadero internacionalismo significa apoyo moral, político y material, práctico, a la lucha revolucionaria. Cualquier otro enfoque, que pretenda utilizar esta lucha para intereses mezquinos, solo equivale a tráfico. En este sentido, como parte de dar unos primeros pasos hacia la construcción del frente antiimperialista, hacemos un llamado a todos los amigos de la revolución india a realizar un Día Internacional de Acción conjunto en apoyo a la Guerra Popular en India el próximo el 9 sólo equivale a tráfico. En este sentido, como parte de dar unos primeros pasos hacia la construcción del frente antiimperialista, hacemos un llamado a todos los amigos de la revolución india a realizar un Día Internacional de Acción conjunto en apoyo a la Guerra Popular en India el próximo el 9 sólo equivale a tráfico. En este sentido, como parte de dar unos primeros pasos hacia la construcción del frente antiimperialista, hacemos un llamado a todos los amigos de la revolución india a realizar un Día Internacional de Acción conjunto en apoyo a la Guerra Popular en India el próximo el 9de julio de este año. ¡Salgamos a las calles con acciones fuertes y ruidosas que traigan esperanza y alegría al pueblo y miedo y desesperación a los apologistas del imperialismo!
¡VIVA LA GUERRA POPULAR EN LA INDIA!
¡ABAJO EL IMPERIALISMO!
Brasil: Frente Revolucionario por la Defensa de los Derechos de los Pueblos
Turquía: AGEB (Unión de Trabajadores Inmigrantes en Europa)
Perú: Movimiento Popular Perú
Ecuador: Frente para la Defensa de las Luchas Populares
México: Sol Rojo – Corriente del Pueblo
Colombia: Frente Revolucionario Antiimperialista
Alemania: Liga contra la Agresión Imperialista (Hamburgo) y Comités Rojos de Mujeres
Austria: Comité de apoyo a la Guerra Popular en India
España: Colectivo Internacionalista Proletario
Finlandia: Liga Antiimperialista
Noruega: frente rojo
Dinamarca: Colectivo Antiimperialista
Francia: Comité Nuevo Brasil
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